Enebro

Depurativo, rubefaciente, diurético y carminativo

Arbusto de 1 ó 2 m. de altura, de hojas aciculares, tiesas y extendidas, casi punzantes, dispuestas casi siempre de tres en tres, en la cara superior se foma una ancha franja de color verde pero desaparece con sólo restregarla; unos enebros echan flores masculinas únicamente y otros sólo flores femeninas, lógicamente estos últimos son los que crían los glabulos (bayas), que son redondas, marcadas con un triángulo en el ápice, son de, color negro y cuando están maduras desprenden un cierto aroma parecido al de la canela.
Se cría en las montañas, convive con los pinos silvestres, con los robles y con las hayas.
Florece en primavera y los glabulos no maduran hasta el otoño del tercer año, que es cuando se recolecta.
Principios activos: Las bayas contienen un aceite esencial formado por alfapineno, cadineno, canfeno y terpineol; azúcares, ácidos orgánicos y un principio amargo.
Propiedades: Depurativo, tónico estomacal, rubefaciente, diurético y carminativo.
Aplicaciones: En decocción su empleo más generalizado es como diurético, carminativo y antirreumático.
Uso cosmético: En fricciones cutáneas se utiliza en la alopecia.
Uso dietético: Con las bayas se elabora la ginebra.
Partes utilizadas: Las bayas.
Presentación: Bayas desecadas y aceite esencial.